Sueño con serpientes, de Silvio. Con cita de Bertold Brecht.
Seguimos con las jornadas soporíferas. Algo tiene la plaza Primero de Mayo para que todo el que pase por allí se quede dormido. Como vemos en la foto, un turista ha decidido echar una siestecita para cumplir con la sana tradición nacional de la sobremesa (y, de camino, tratarse la espalda a base de piedra de banco). Me río yo de los colchones Flex.
Pero ahí no queda la cosa, porque detrás, tres paisanos deciden hacer lo propio. La señora de la silla de ruedas se ha quedado frita (por el sueño y por el efecto del calor), al igual que la pareja de personas mayores que, supuestamente, está cuidando del nieto. Quizá la causa sea la música que sale del Conservatorio (situado detrás), la homilía del párroco de la iglesia de San Pablo (situada a la derecha), o los efectos de las cervecitas del bar El Maño (situado enfrente). El hecho es que da gusto verlos.
Siendo la hora que es, y para no quedar mal, yo me voy a dormir. Buenas noches.
2 comentarios:
Vuelvo de vacaciones y me encuentro con esta bonita entrada con una magnífica canción.
La verdad es que un siesta bien echá a la sombra en el Paseo Mercao tiene que estar bien...
Un abrazo
Cualquier día te veremos a ti durmiendo en tu banco, al fresco delante del Salvador.
Ciertamente la canción es preciosa. Me alegra que compartamos gustos. Y lástima que Silvio haya decidido retirarse de los escenarios (aunque yo aún no me lo he creído del todo).
Saludos somnolientos.
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