'Azul', de Elefantes (con Bunbury), un grupo al que se añora.
Nunca vi la avenida de la Libertad en estas condiciones. ¿Quién se iba a imaginar hace unas semanas que este sería su aspecto en una jornada laboral y a las doce del mediodía?.
Tal prodigio no lo ha conseguido ni una procesión, ni la grúa municipal, ni una cabalgata. Ni siquiera la brigada de pintores o la de mantenimiento prohibiendo aparcar para acometer una intervención. El milagro de hacer desaparecer los coches hay que atribuírselo a la zona azul.
Ni David Copperfield, oiga: el lunes de la semana pasada no había ni un hueco libre para aparcar un Smart, y el martes podían haber estacionado todos los de la serie 'Los autos locos' con Pierre Nodoyuna a la cabeza y su perro Patán. En las fotos tenéis el antes y el después. Y lo mismo ocurre en otros lugares antes atestados de vehículos, como la Cruz de Hierro, que ahora parece un descampado.
El hecho es que esto de pagar por aparcar parece que no ha convencido.
5 comentarios:
J.A. Molina Reyes:
El sábado por la mañana pase por la avenida de la Libertad y Ramón y Cajal, y costaba trabajo incluso saber por donde estaba pasando.
Vaya invento este de la zona azul.
Si no la usamos se la tendrán que comer con patatas como la vez anterior.
No se de donde se han sacado que esto lo pidieron los comerciantes.
Es una pena ver las calles así, es como si todos los días fueran domingo, ya que no se ve gente por las calles. La frase sería: "Los coches dan ambiente, aunque contaminen" ;) En fin con la bici todo arreglado.
En agosto que de por si las calles están vacías, de que van a comer los que ponen las multitas, porque a 0,20 céntimos no sacan ni pa polos ;) jerjejejje
Gracias a la zona azul, todos los días son Semana Santa...
jajajaja. Muy bueno, Jose. Un gran slogan publicitario.
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