martes, 5 de julio de 2011

LA MAGIA DE LA SINAGOGA DEL AGUA EN EL SOLSTICIO DE VERANO


La Sinagoga del Agua, ese espacio descubierto en Úbeda para disfrute de toda la humanidad, mostró con más fuerza ese halo de magia que envuelve cada una de sus estancias. Es algo que sólo se puede ver en un momento muy concreto del año. Ocurrió hace unos días, coincidiendo con el solsticio de verano. En su cota más profunda, en un espacio abovedado y oscuro situado muchos metros bajo el nivel de la calle, donde se encuentra la sala de baño o mikvéh para las purificaciones de la tradición judía, a eso de las nueve y media de la mañana los rayos del sol penetraron por un ventanuco situado en la parte superior, formando un haz de luz que casi se podía palpar y que llegó a tocar el agua del pequeño estanque existente. Para quienes estábamos allí, vivirlo fue realmente especial.

Las personas que no dudan de la autenticidad de la Sinagoga como el vestigio judío más importante de la ciudad ubetense y de muchos, muchísimos kilómetros a la redonda, algo que cada vez está tomando más cuerpo con argumentos sólidos y concluyentes, tienen claro que este acontecimiento que se repite una vez al año no es fruto de la casualidad. Según defienden, la entrada de los rayos de luz justo el día del solsticio de verano tuvo que ser algo premeditado y tenido en cuenta a la hora de habilitar esta sala excavada en la roca hace siglos, con la intención de dar mayor simbolismo al acto de purificación. Mucho tiempo después, el fenómeno se repite gracias a la recuperación de este lugar.

7 comentarios:

José Luis Cano Palomino dijo...

Muchas gracias por la información y por la fotografía.
Salu2
José Luis Cano Palomino

Juan Carlos Guijarro dijo...

Es un fotón!!! Lástima los que asoman en el dintel...

Alberto Román dijo...

Fue espectacular...... gracias a Andrea Pezzini y a Fernando Crespo.....

Andrés Cordero dijo...

Los que aparecen en el Dintel, se pueden quitar con Photoshop y así quedaría la foto limpia y preparada para publicar. Es una maravilla, enhorabuena al fotógrafo.

Alberto Román dijo...

Gracias a todos por los comentarios.... la verdad es que hacer la foto era coser y cantar.... sólo había que accionar el disparador... el resto ya estaba allí... (bueno, reconozco que moví el candelabro para que saliera en la estampa)

Por cierto, los dos que aparecen en la puerta son Fernando (propietario) y Andrea (dirige las visitas) y merecen de sobra estar ahí porque son unos fenómenos y porque me permitieron entrar, claro!!!!

Lo dicho, gracias a todos por pasar por aquí...... es un honor.

mavalca dijo...

Buena de verdad, y sabes que ahí afino bastante. Y desde luego que te llamaron para el momento oportuno. ¿Sentiste alguna sensación especial?, ¿levitaste?, ¿te purificaste en el agua?... ¡Vamos, al menos, te tomarías algo, que esa foto lo merece!

JASA dijo...

Creo que el hecho de que aparezcan dos personas detrás le da más realismo a la fotografía. A ver si el año que viene os acordáis de mi y me apunto.