'Pintar', de Espinete y Don Pimpón. Toda una frikada.
Menudo brillo luce la versión en bronce del diestro Antonio Millán 'Carnicerito de Úbeda'. Ni con el traje de luces que vistió en su día al sol de los ruedos se vio este hombre tan deslumbrante. Después de sufrir ciertos actos vandálicos y verse pintado de verde y rosa fluorescentes, además de ser tachado con la misma pintura de «asesino», el Ayuntamiento dio orden de limpiar la estatua.
Pero como 'el frotar se va a acabar', y a base de trapo, cepillo y disolvente la cosa se resistía (tampoco era cuestión de dañar la escultura), pues se buscó una solución rápida, bonita y barata. Además, salvo en el caso de cierta 'princesa del pueblo', para nadie es plato de gusto estar durante 15 minutos frotando la taleguilla de un torero, por muy de bronce que sea (en este caso la dureza está asegurada).
Así, los operarios se armaron de pintura y pistola y le dieron una buena mano de 'Titanlux'. Y nada de mate. Es mejor con brillo... ¡dónde va a parar!. Y así ha quedado la cosa... hasta que un desaprensivo decida volver a darle un toque de color.
2 comentarios:
Aunque con dudoso gusto, la estatua ya sido "reparada"; ahora falta que a la calle que también lleva el nombre del torero se le dé un charipeo, pues está -como la gran mayoría- intratable para neumáticos, amortiguadores y otras piezas caras y vitales de los coches. Saludos
Yo ya me dejé una rueda......
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